sábado, 18 de enero de 2020

Días de lluvia y viento.

Cuando salimos a observar aves, en algunas ocasiones nos tocan de esos días de temporal, con intensas lluvias y fuerte viento.

Estos días resultan complicados, pues cuesta mantener el paraguas con una mano, mientras con la otra se intenta hacer uso de los prismáticos, para ir observando las aves, teniendo que secar una y otra vez las lentes, para poder ver a través de ellas.

El pasado día 30 de noviembre fue uno de esos días. Cuando nos dispusimos a realizar la observación de aves, vimos que había un elevado número de agachadizas comunes alimentándose en los limos, en zonas próximas a los carrizos. Entre ellas pudimos localizar un ejemplar de agachadiza chica, que permaneció alimentándose durante unos minutos, para posteriormente ir adentrándose en los carrizos, hasta desaparecer de nuestra vista.




Unos metros mas adelante, en la misma campa, vimos un mosquitero que evolucionaba sobre la hierba, buscando alimento. Tras observarlo bien vimos que se trataba de un mosquitero bilistado. Vimos que se posaba en la rama de un árbol para comer un gusano capturado. Seguidamente abandonó la zona y no volvimos a verlo. No reclamó en ningún momento.